1 Juan 3:17-19 Nueva Versión Internacional (NVI)
17 Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él? 18 Queridos hijos, no amemos de palabra ni de labios para afuera, sino con hechos y de verdad.
19 En esto sabremos que somos de la verdad, y nos sentiremos seguros delante de él
En estos días de pánico e inestabilidad económica, son muchos quienes se encuentran en medio de la incertidumbre y sin la posibilidad de cubrir sus necesidades más básicas como alimento, refugio o vestido pero al mismo tiempo, son muchos los que encuentran que sus corazones se han enfriado y que el egoísmo ha logrado su cometido.
La misericordia como uno de los valores fundamentales de la vida cristiana debe ser visible y palpable en todas las situaciones aún más en épocas de crisis, pues es aquí donde se prueba nuestro amor y confianza en Dios y esto implica que la oración como fundamento de nuestra fe requiere estar acompañado de obras que manifiesten nuestra voluntad y convicción de ayudar a nuestros prójimos, pues como seguidores de Cristo, quién es el verbo, la acción, somos agentes activos de la voluntad de Dios, pues es así como por medio de estos actos, quienes aún no le conocen darán gracias a Dios por su bondad y amor.
No perdamos la oportunidad de ser la entrada para quienes están a las puertas del reino de Dios, mediante el acto más mínimo de misericordia puedes ser la representación terrenal del Dios viviente que ama y cuida de sus hijos.
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